Limpiar la piel antes de usar. Aplicar una gota en la cuenca y otra en la sien. Extender suavemente procurando no formar arrugas en la piel. Tras darle 3-4 pasadas, presionar la parte del lagrimal para drenar. Realizar un suave tecleteo de las yemas para favorecer la absorción. Se recomienda no aplicar en los párpados.